La agencia de calificación crediticia internacional Moody´s indicó el jueves que está estudiando elevar la nota de Turquía pero que antes el país euroasiático debe tomar medidas fiscales y monetarias que frenen el actual desfase entre importaciones y exportaciones que arrastra la economía turca, al tiempo que advirtió sobre la necesidad de controlar la inflación.
En declaraciones hechas el jueves a la prensa por Sarah Carlson, analista de Moody’s, tras la publicación del informe crediticio anual de la compañía -en el que Turquía se mantiene con una calificación de Ba2 con perspectiva positiva-, esta subrayó que la economía turca ha demostrado una más que notable capacidad de recuperación durante la crisis financiera mundial, logrando recuperar un crecimiento elevado a partir de 2010.
No obstante Carlson apostó por una política de tasas de interés más rígida por parte del Banco Central Turco (TMB, por sus siglas en turco) para contribuir a frenar la inflación y el consumo interno, que ha disparado el balance entre importaciones y exportaciones del país hasta el punto de que el déficit comercial de Turquía alcanzó durante los diez primeros meses de 2011cerca de 67.000 millones de euros, un incremento del 63,5% con respecto al mismo período del año anterior.
La analista de Moody’s también advirtió sobre los últimos aumentos de la tasa de inflación, que calificó como “una preocupación evidente”. Los precios en el país euroasiático experimentaron en septiembre su mayor aumento de los últimos nueve años obligando al TMB a revisar en octubre su previsión de inflación para finales de año del 6,9% anterior al 8,3%, muy por encima de su objetivo inicial fijado en el 5,5% para 2011.
Según la agencia de calificación parte de la explicación de ese aumento en los precios hay que buscarla en el debilitamiento de la moneda nacional, la lira turca (TL), que en el último año ha un perdido un 30% de valor con respecto al dólar si bien en las últimas semanas ha logrado mantenerse frente a las divisas de otros países emergentes.
A juicio de Moody’s la perspectiva positiva de la deuda pública turca y su nota Ba2 refleja la solidez mostrada por la economía de Turquía durante la crisis económica mundial que ha sacudido especialmente a sus vecinos europeos y hay margen para elevar su calificación, pero antes Ankara debe tomar medidas para corregir su balanza comercial y evitar los efectos de un posible “sobrecalentamiento” de su economía. Link a la noticia: La agencia de calificación crediticia internacional Moody´s indicó el jueves que está estudiando elevar la nota de Turquía pero que antes el país euroasiático debe tomar medidas fiscales y monetarias que frenen el actual desfase entre importaciones y exportaciones que arrastra la economía turca, al tiempo que advirtió sobre la necesidad de controlar la inflación.
En declaraciones hechas el jueves a la prensa por Sarah Carlson, analista de Moody’s, tras la publicación del informe crediticio anual de la compañía -en el que Turquía se mantiene con una calificación de Ba2 con perspectiva positiva-, esta subrayó que la economía turca ha demostrado una más que notable capacidad de recuperación durante la crisis financiera mundial, logrando recuperar un crecimiento elevado a partir de 2010.
No obstante Carlson apostó por una política de tasas de interés más rígida por parte del Banco Central Turco (TMB, por sus siglas en turco) para contribuir a frenar la inflación y el consumo interno, que ha disparado el balance entre importaciones y exportaciones del país hasta el punto de que el déficit comercial de Turquía alcanzó durante los diez primeros meses de 2011cerca de 67.000 millones de euros, un incremento del 63,5% con respecto al mismo período del año anterior.
La analista de Moody’s también advirtió sobre los últimos aumentos de la tasa de inflación, que calificó como “una preocupación evidente”. Los precios en el país euroasiático experimentaron en septiembre su mayor aumento de los últimos nueve años obligando al TMB a revisar en octubre su previsión de inflación para finales de año del 6,9% anterior al 8,3%, muy por encima de su objetivo inicial fijado en el 5,5% para 2011.
Según la agencia de calificación parte de la explicación de ese aumento en los precios hay que buscarla en el debilitamiento de la moneda nacional, la lira turca (TL), que en el último año ha un perdido un 30% de valor con respecto al dólar si bien en las últimas semanas ha logrado mantenerse frente a las divisas de otros países emergentes.
A juicio de Moody’s la perspectiva positiva de la deuda pública turca y su nota Ba2 refleja la solidez mostrada por la economía de Turquía durante la crisis económica mundial que ha sacudido especialmente a sus vecinos europeos y hay margen para elevar su calificación, pero antes Ankara debe tomar medidas para corregir su balanza comercial y evitar los efectos de un posible “sobrecalentamiento” de su economía. Link a la noticia: La agencia de calificación crediticia internacional Moody´s indicó el jueves que está estudiando elevar la nota de Turquía pero que antes el país euroasiático debe tomar medidas fiscales y monetarias que frenen el actual desfase entre importaciones y exportaciones que arrastra la economía turca, al tiempo que advirtió sobre la necesidad de controlar la inflación.
En declaraciones hechas el jueves a la prensa por Sarah Carlson, analista de Moody’s, tras la publicación del informe crediticio anual de la compañía -en el que Turquía se mantiene con una calificación de Ba2 con perspectiva positiva-, esta subrayó que la economía turca ha demostrado una más que notable capacidad de recuperación durante la crisis financiera mundial, logrando recuperar un crecimiento elevado a partir de 2010.
No obstante Carlson apostó por una política de tasas de interés más rígida por parte del Banco Central Turco (TMB, por sus siglas en turco) para contribuir a frenar la inflación y el consumo interno, que ha disparado el balance entre importaciones y exportaciones del país hasta el punto de que el déficit comercial de Turquía alcanzó durante los diez primeros meses de 2011cerca de 67.000 millones de euros, un incremento del 63,5% con respecto al mismo período del año anterior.
La analista de Moody’s también advirtió sobre los últimos aumentos de la tasa de inflación, que calificó como “una preocupación evidente”. Los precios en el país euroasiático experimentaron en septiembre su mayor aumento de los últimos nueve años obligando al TMB a revisar en octubre su previsión de inflación para finales de año del 6,9% anterior al 8,3%, muy por encima de su objetivo inicial fijado en el 5,5% para 2011.
Según la agencia de calificación parte de la explicación de ese aumento en los precios hay que buscarla en el debilitamiento de la moneda nacional, la lira turca (TL), que en el último año ha un perdido un 30% de valor con respecto al dólar si bien en las últimas semanas ha logrado mantenerse frente a las divisas de otros países emergentes.
A juicio de Moody’s la perspectiva positiva de la deuda pública turca y su nota Ba2 refleja la solidez mostrada por la economía de Turquía durante la crisis económica mundial que ha sacudido especialmente a sus vecinos europeos y hay margen para elevar su calificación, pero antes Ankara debe tomar medidas para corregir su balanza comercial y evitar los efectos de un posible “sobrecalentamiento” de su economía. Link a la noticia: